La intendente de Mercedes, Juanita Gauto, ha desencadenado una tormenta política al acusar directamente al presidente del Concejo Deliberante, Caly Sánchez, y a la concejal Iris Montenegro de ser los responsables de un retraso significativo en el pago de un plus a mil familias de la ciudad. Gauto afirmó que las familias afectadas tuvieron que esperar diez días adicionales para recibir el beneficio, un problema que atribuye a la ineficiencia y la falta de coordinación por parte de los mencionados funcionarios.
“Acá hubo mil familias que tuvieron que esperar 10 días para poder cobrar el plus, y la responsabilidad es del Presidente del Concejo Deliberante y la concejal Iris Montenegro”, dijo Gauto. Subrayando la seriedad de sus acusaciones, la intendente afirmó tener pruebas que respaldan sus palabras: “Es la verdad y lo puedo comprobar”.
Este conflicto se produce en un contexto ya tenso, marcado por el reciente escándalo de corrupción que involucró a Diego Caram, exfuncionario condenado por sustracción de dinero del Estado. La situación ha exacerbado las divisiones políticas dentro del gobierno municipal.
Gauto también manifestó la difícil situación en la que se encuentra al tener que mantener la colaboración institucional con Sánchez pese a las diferencias políticas: “En lo institucional debo seguir trabajando con él, pero en lo político no puedo seguir trabajando con ellos que muestran una incoherencia de esta manera”, concluyó.
Este enfrentamiento refleja no solo las tensiones personales sino también las profundas fracturas políticas dentro del gobierno local. La gestión de Gauto enfrenta el desafío de mantener la estabilidad administrativa y la confianza ciudadana en un clima de confrontación y desconfianza. La ciudadanía observa con preocupación cómo estas disputas pueden afectar la eficacia del gobierno y la calidad de los servicios públicos en Mercedes.
